Gracias a todo por vuestro apoyo, vuestra compañía, vuestras palabras, vuestra envidia sana. Gracias por ser parte de mi camino, de mi viaje constante en esta vida. Gracias por darme la oportunidad de disfrutar de ese largo viaje a vuestro lado aunque sólo hayamos cruzado nuestras rutas un par de veces. Gracias por hacer mi camino más llevadero.
Quiero haceros llegar esa sensación de superación que me ha acompañado constantemente, la felicidad de experimentar que el mundo es tan sólo un pequeño lugar esperando que salgas a descubrirlo. Quiero compartir todas esas sensaciones con vosotros porque, de una u otra forma, formáis parte de ellas, y porque sin duda no sería lo mismo sin vosotros.
Para todos aquellos que habéis comentado sobre mi aparente tristeza al volver, sólo puedo contaros que no es tal o por lo menos no pesa tanto como para borrar la enorme experiencia que he vivido, y que aún me queda por vivir. Si alguna vez creéis que mis lágrimas no me dejarán ver la luz del sol, recordar las palabras de Paulo Coelho:
"Las palabras son lágrimas que han sido escritas. Las lágrimas son palabras que necesitan ser derramadas. Sin ellas, el placer pierde todo su brillo y la tristeza no tiene fin."
Gracias.
Gracias a ti, por ser tan especial y dejarnos compartirlo...estaré siempre ahí..
ResponderEliminarGracias primo por habernos hecho participes de esta experiencia que, gracias a tus palabras, tan bien escritas, has hecho que fuéramos contigo subidos en "la flaca" y que hayamos disfrutado en la distancia de esta gran experiencia que nos hace darnos cuenta de los increíbles paisajes, lugares y personas de este planeta que tenemos la suerte de disfrutar.
ResponderEliminarNos alegramos de que hayas llegado sano y salvo.
Un abrazo de José Luis y Anuska.
Gracias a ti por compartir este viaje con nosotros, si te lías la manta a la cabeza de nuevo espero poder volver a hacerlo....... :)
ResponderEliminarVsssssssssssssssssss
Yo soy el esporadico que te ha leido, el esporadico que te ha visto en las fotos y el esporadico que te envidia.
ResponderEliminarMe parece una gran aventura y como eso lo debes recordar y aprender, aprender de las experiencias vividas para una próxima vez. Seguro que la habrá.
Por cierto, no creo que las lagrimas no te dejen ver la luz del sol, sino que llorar por no ver el sol, te impedira con las lagrimas ver las estrellas.
Un abrazo
Las lagrimas ali"v"ian la sequedad del ojo.
ResponderEliminarAl recuperar su estado cristalino,
vuelves a ver la clara luz para continuar el camino sin miedo a mirar atras.
Sin miedo, volver a ver los maravillosos momentos vividos y sufridos.
Sin lagrimas; los ojos se secan del todo, dejan de enviar informacion al cerebro, llegando
a secar el alma.
Gracias a ti.
Un a"V"razo con u"V"e grande!...¡¡MAESTRO!!
Maestro Kalimotxo. Mira que conozco personalmente gente que anda en moto y que ha hecho auténticas barbaridades, pero hoy estoy orgulloso de poder contar que te conozco a tí, que alguna vez he compartido ruta y mantel contigo, incluso, que me he montado en tu moto, el tu Gata.
ResponderEliminarTú si que eres un auténtico héroe, y déjate de ostias.
Supongo que, a día de hoy, te faltará algo.... ese arrancar diario de motor para hacer con cierto sufrimiento, pero con cierto gusto dulce, una larga jornada de kilómetros, superando problemas, pasando por lugares maravillosos.
Solo espero que "La Flaca" llegue también a su destino, para que os podáis ver, por lo menos una vez más.
Desde los Mandriles que nos vieron nacer.
Vssssssssssssssssss MAESTRO